NO MOLESTE, MUJER EN RECONSTRUCCIÓN
- perspectivatransfeminista
- 30 ago 2020
- 2 Min. de lectura
Ese título y parte de lo escrito a continuación, corresponde al año pasado:
Qué insignificante ha sido la vida cuando antepuse el bienestar de otras personas, que poco valor me han tenido por “dejar” que ocupen mis pensamientos y mis acciones, cómo “permitir” que te desotren, cómo “permitir” que te despersonalicen,cómo “permitir” dejar de ser.
Forjaron todo tipo de deseo, ideal o querencia ejerciendo la violencia patriarcal heteronormada habida y por haber.
Que un simple “no fue tu culpa”, “no te lo merecías” , “vas a estar mejor” hayan sido más sanadores que escuchar la voz interior que en realidad era otra persona que depositaba el ideal de persona que esperaban de mí, decepcionarla y romper con esos ideales duelen, maltratan y desvalorizan por desnaturalizarlos.
La discusión interna, cuan conflicto desata angustia, bronca e impotencia y vos como si nada, tratando de mostrarle al resto que no sos débil, porque no debés ser débil bajo los estándares sociales. Que en determinados acontecimientos no actúes o dejes de actuar en situaciones de encubrimiento, de idolatrar personas que te hayan roto por dentro.
Esa lucha interna entre la mujer o niña que era, llena de prejuicios y valores heteronormados se ve amenazada por una reconstrucción de mujer sobreviviente, queriendo recuperar su dominio y autodeterminación, su independencia y libertad de pensamientos, robarle el papel principal a la culpa, cargar emociones ajenas, esa mujer ya está cansada, quiere determinar, que se ama, que salen nuevos brotes, se nutre y embellece, con ansias de empoderamiento, convertir lo malo en algo mejor, transformarlo en amor y respeto hacia sí misma.
Hoy sería: NO ME MOLESTEN, ME SIGO DECONSTRUYENDO
En ese momento me sentía que estaba rota y necesitaba armarme , al día de hoy encontrar este texto después de un año, del armado del blog, es impresionante lo que sané y lo que aún falta por sanar.
Me di cuenta que no eran piezas las que había que volver a unir, sino pensar nuevas piezas, más sólidas, independientes y únicas.
Esas piezas necesitan ser mucho más deseantes para armar/amar a la mujer que hoy soy y que siempre puedo mejorar para mí, en primer lugar, y luego para el resto que me rodea y me quiere.
Reconocer, permitirse sentir es parte de ello, aceptar el amor, aceptarse con la historia, el cambio y el futuro de quien quiero ser.
Saber elegir con quien estar, alejarme de personas con los que se repiten ciertos patrones a tiempo, o en tránsito, poder discutirlo, hablarlo, permitirse amar y ser amado en todos los aspectos, no solo en el plano sexo-afectivo sino en el afectivo,en el social.

Gracias a mí por permitírmelo,
a vos por acompañarme,
y a vos por leerme.
Soledad Gambaleri
Comments